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30 enero, 2019

Polar

Acción loca pero sin alma...

Caratula
  • Título traducido: Polar
  • Director: Jonas Åkerlund
  • Guión: Jayson Rothwell, Victor Santos (original)
  • País: Estados Unidos Año: 2019 Duración: 118 min.
  • Música: Deadmau5  Fotografía: Pär M. Ekberg
  • Compañía: Constantin Film Produktion, Dark Horse Entertainment, Netflix
  • Intérpretes: Mads Mikkelsen, Vanessa Hudgens, Katheryn Winnick, Matt Lucas, Nia Roam, Johnny Knoxville, Richard Dreyfuss, Robert Maillet, Ruby O. Fee, Sima Fisher, Anastasia Marinina, Inga Cadranel, Fei Ren
  • Género: Acción, Thriller
Sinopsis
Duncan Vizla está a dos semanas de jubilarse como el asesino más letal del mundo, Black Kaiser, a la espera de percibir la cuantía total de su pensión para intentar olvidarse de su oficio, retirado en una casita de montaña. Pero el hombre a la cabeza de la organización para la que trabaja, Blut, quiere evitar pagar lo que debe a todos los agentes en su misma situación, forzando para ello su muerte y así cumplir una de las cláusulas contractuales...

Basada en el áspero y contundente webcomic de Víctor Santos, el cual bebe de los mejores maestros del noir para desarrollar sus magníficos relatos, Netflix ha apostado por llevarlo a la pequeña pantalla convertido en una película de acción real, escogiendo para dirigir el proyecto a un ya conocido Jonas Åkerlund (Lords of Chaos, 2018) y como principal protagonista al siempre agradecido Mads Mikkelsen. Ya sea como germen para iniciar una franquicia y continuar con más títulos en un futuro o sencillamente como revulsivo dentro de su oferta, la verdad es que la película promete más de lo que llega a ser una vez vista...

En los primeros minutos de visionado ya se puede apreciar el background que tiene el director en el mundo del videoclip musical, cargando su estética a base de imágenes saturadas de color, secuencias rápidas a ritmo del compás que suena de fondo y transiciones que emulan la estructura del cómic en papel. Son agradecidas sobretodo porque va relacionado con las escenas de acción, y éstas no están nada mal para lo locas que pueden llegar a ser en algunos momentos. El problema viene cuando tiene que seguir desarrollando la historia, en los momentos de transición más lenta, ya que pierde toda esa fuerza y no aporta ninguna sensación al espectador.

Quizá también sea culpa del reparto escogido para acompañar a nuestro anti-héroe, ya que aún sin estar a su mejor nivel, Mikkelsen absorbe cualquier interpretación que aparezca junto a la suya en pantalla. El resto queda relegado a un segundo plano, casi más de relleno que por intentar aportar algo más que su papel dentro de la historia, algunos incluso sin estar a la altura de sus personajes (como Blut, por ejemplo), dando como resultado una interpretación más histriónica que convincente. Y es que seguramente venga dado por la falta de dirección de actores de Åkerlund, ya que algunos de ellos los hemos visto mucho más expresivos en otros trabajos.

En definitiva, esta intención de Netflix por cosechar en su casa un éxito similar como el obtenido por la saga John Wick parece no haber dado con la tecla adecuada. El material del que disponía es de primera, el personaje es el adecuado para un espectáculo de acción y violencia, y el presupuesto tampoco es que haya sido muy ajustado. Así pues, ¿valorarán la opción de seguir con la saga o lo dejarán en una entrega única? Esperemos a ver si con el tiempo se llega a una reflexión, ya que un segundo intento podría estar muy bien (o ser el desastre definitivo)...


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